Cada participante del público entra de uno en uno (máximo de dos en dos) en la estructura por periodos de 5 a 10 minutos.
El teatro de La Barraca, de Federico García Lorca, planteó en la primera mitad del siglo XX una forma revolucionaria de llevar el teatro clásico a los pueblos. En homenaje al Teatro itinerante de la Barraca de Federico García Lorca, llega el día 8 de agosto, a las 22.30 h, a Cantaracillo (Salamanca) Metatopia, una Barraca del siglo XXI.
METATOPIA es una experiencia interactiva inmersiva de realidad virtual y física creada por el artista Jaime del Val en el proyecto Europeo Metabody. Se trata de unas estructuras o metaesculturas transparentes y móviles sobre las que se proyectan imágenes digitales abstractas y sonidos electrónicos que se modifican por medio de sensores en el cuerpo de cada participante, en el espacio público.
Durante las aproximadamente dos horas el público puede ir y venir, moverse alrededor de la estructura, sin sentarse, pero lo más importante es que cada participante del público entra de uno en uno (máximo de dos en dos) en la estructura por periodos de 5 a 10 minutos, esta es la experiencia clave: la inmersión uno a uno en el entorno virtual, el resto del tiempo si lo desea el público puede permanecer caminando alrededor de las estructuras, acercándose y alejándose.
La inmersión consiste en que el/la participante (incluidos niños, anciano o personas con discapacidad) llevará colocados unos sensores en el cuerpo y se conectará físicamente con la estructura, de modo que cada pequeño movimiento del participante crea un mundo visual sonoro y multisensorial que cambia constantemente, un mundo abstracto y amorfo que invita a descubrir sensaciones y movimientos siempre nuevos.
En tiempos de una cultura digital de smartphones, emoticonos, redes sociales y selfies, que tiende a olvidar o reducir el cuerpo y que favorecen el
sentido de control y separación entre uno el entorno, Metatopia reintroduce el cuerpo, la indeterminación y el sentido de inseparabilidad del entorno, un entorno que uno mismo crea con movimientos nuevos y descubriendo sensaciones nuevas. Al mismo tiempo, Metatopia convierte en espacios de juego entornos urbanos y rurales, recuperando un espacio público de juego sensorial, e itinerando por muchos lugares, como una Barraca del S. XXI, y en homenaje al teatro itinerante de Lorca llamado la Barraca.
En Metatopia, como un reverso del videojuego, el usuario debe perder el control y entrar en simbiosis con el entorno multisensorial y orgánico que surge a partir de sus movimientos, poniendo en valor de la diversidad de cada cuerpo y de cada entorno. Se trata de una viaje a otra dimensión, otras experiencias de espacio y de tiempo que se salen de las convencionales, sin coreografías prescritas ni finalidades prestablecidas, donde todo surge del movimiento, siempre indeterminado, y el sujeto pierde el control dejándose llevar por el juego con el entorno que crea.
La estructura física, flexible dinámica (flexinámica), es como un intersticio, un órgano o tejido interno que conecta cuerpos y lugares, creando un Metacuerpo; o también una crisálida para un viaje experiencial y transformador que, como el final de 2001, de Kubrick, mira más allá de lo humano conocido hacia una nueva sensibilidad.
Metatopia se ha desarrollado en el marco del proyecto europeo Metabody, coordinado por Jaime del Val y la asociación Reverso y cuenta con el apoyo del INAEM. Esta actividad está hecha en colaboración con el Ayuntamiento de Cantaracillo, la Asociación Calentejo y la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, y se enmarca dentro del proyecto 1234REDES_CON que desarrolla la Fundación Germán Sánchez Ruipérez en colaboración con otras siete instituciones españolas y portuguesas, una iniciativa cofinanciada por el FEDER a través del programa INTERREG V-A España-Portugal (POCTEP) 2014-2020.